Empacar la maleta para emprender un viaje lleno de aventura, es una actividad que pasa de ser aburrida a emocionante, sin embargo, los imprevistos pueden acontecer siempre en un viaje, aunque planeemos algo milimétricamente.
Seguramente has escuchado esta frase: “No sabía que lo necesitaba, hasta que…”, ya sea porque tú mismo la pronunciaste o la dijo un amigo o conocido después de contarte su experiencia de viaje donde algo inesperado ocurrió.
Aquí te vamos a compartir una recomendación de dos objetos que vale la pena empacar en tu equipaje o maleta de mano, que te ayudarán a estar más preparada o preparado en caso de que ocurra un imprevisto.
El arte de empacar la maleta
Para aquellos que tienen muy poca experiencia viajando, la clave de empacar una maleta está en la organización. Debes conocer los días de estancia y destinos que visitarás.
Contemplando así los artículos más comunes desde la ropa, accesorios, maquillaje, protección solar, calzado, documentos, medicamentos, cámaras o laptops, equipo para hacer alguna actividad deportiva, etcétera.
Esto nos hace sentido, ¿correcto? Pero dentro de todo esto, hay dos cosas poco comunes que la gente omite al empacar, porque no consideran que sean realmente útiles y que las vayan a ocupar.
Ropa maltratada o rota
Te sorprenderá saber la cantidad de personas viajeras que han confesado haber tenido que utilizar engrapadoras o cinta adhesiva para arreglar alguna prenda que se lastimó o rompió durante un viaje.
Es por esta razón que algunos hospedajes suelen ofrecer de cortesía en la habitación un poco de hilo y aguja para arreglar cosas pequeñas, estilo un botón caído, pero ¿y si el daño es más grande?
Puedes solicitar que la reparen usando el servicio de sastrería, que suele ser bastante caro o podrías arreglarlo tú mismo, usando una máquina de coser portátil.
Las que utilizan pilas como la Magic Stitch Deluxe, son las más prácticas, simplemente insertas las baterías, colocas el hilo y coses la prenda lastimada, nadie notará el desperfecto, porque este tipo de aparato, además de discreto y liviano ofrece un acabado muy profesional.
Empacar calzado extra o de repuesto
Lo segundo que llega a ocurrir con bastante frecuencia y es divertido de escuchar a excepción de la persona a la que le pasa, es cuando se pierde el calzado o se moja y no tenemos preparado un repuesto.
Siempre es bueno llevar un par extra por si acaso y es aún mejor cuando son pantuflas Sognare. Las pantuflas pueden acomodarse muy bien y sin esfuerzo en el equipaje de mano, son muy livianas, así que si extravía tu equipaje documentado y necesitas calzado de emergencia estas pantuflas son una opción.
Además, hemos descubierto que son muy suaves en su interior y tiene Memory Foam que ayuda a relajar el pie, lo cual es un extra de alivio, cuando se pasa mucho tiempo en espera en el aeropuerto o central de autobús estando de pie o caminando por varias horas.